En este Código de Barras hablamos de lo fácil que es entrar en una lista de morosos y lo complicado que es salir
1. ¿Qué listas de morosos existen? ¿Cómo puedo terminar en ellas?
Son unos ficheros donde se incluyen a personas físicas o jurídicas que tengan una deuda pendiente. Existen muchos registros de deudores, pero algunos de los más utilizados son el de la ASNEF (Asociación Nacional de Establecimientos Financieros de Crédito), el de la RAI (Registro de Aceptaciones Impagadas) o el de la CIRBE (Central de Información de Riesgos del Banco de España).
Para terminar en una de estas listas no es necesario tener una gran deuda. Basta con tener cualquier tipo de endeudamiento impagado que supere los 50 euros.
2. ¿Qué tenemos que hacer si nos sucede? ¿A dónde hay que acudir?
Si sospechamos que podemos encontrarnos en una lista de morosos, lo primero que debemos hacer es pedir al organismo en cuestión que nos dé acceso a esa información. Posteriormente hay que presentar toda la documentación en la que se demuestra que la deuda ya ha sido pagada.
3. Muchos usuarios, a pesar de haber seguido esos pasos y de no deber nada, continúan apareciendo en determinados ficheros
En primer lugar, puedes solicitar la suspensión al fichero de morosos. También se puede presentar una reclamación ante la Agencia Española de Protección de Datos contra la entidad acreedora por no haber actualizado la información, lo que puede dar lugar a una infracción y a una sanción.
4. ¿Qué nos puede suponer estar en uno de estos ficheros?
Acabar en una lista de morosos te puede impedir renovar una tarjeta de crédito, incluso que te denieguen una hipoteca o un crédito bancario, así como te puede dificultar la compra de un electrodoméstico a plazos. Además, te pueden obligar a abonar finanzas extra al contratar por ejemplo una línea de teléfono o servicios como la luz o el gas.
5. Es importante tener claros nuestros derechos con este tipo de listas
Por ley, como mínimo tenemos que deber 50 euros. Es obligatorio que nos avisen con un mes de antelación de que nos van a incluir en estas listas. Además, no podemos estar en una de ellas más de cinco años.
6. La lista de morosos no es la única herramienta que los acreedores tienen para intentar reclamar una deuda
Entre ellas se encuentra el cobrador del FRAC, empresa activa en España desde hace más de 30 años. En ella se encargan de estudiar todos los casos. En muchas ocasiones hay expedientes que tienen documentación, pero en otros no cuentan con la información suficiente, por lo que se encargan de investigarlo para poder registrar por escrito lo sucedido para que así la deuda sea algo que se puede probar. Su precio oscila en torno al 35% de lo que nos deban.
7. ¿Por qué en España no hay ficheros de buenos pagadores como en Estados Unidos?
“Los ficheros positivos reflejan cómo hemos pagado las deudas que tenemos asumidas, así como informa de nuestro nivel de endeudamiento. Algo tremendamente relevante, sobre todo cuando se tiene una buena reputación financiera”, cuenta Matilde Cuena, Catedrática de Derecho Civil de la Universidad Complutense y vicepresidenta de la Fundación Hay Derecho.
Cuena asegura que la falta de información sobre la solvencia de los consumidores restringe la competencia, algo que acaba beneficiando a los bancos y perjudicando a los consumidores. Ya que la ausencia de competidores dispara los tipos de interés: en España el tipo medio del crédito al consumo en diciembre de 2020 fue del 7%, tres puntos por encima de la media de la Unión Europea.
¿Se instaurarán estos ficheros en España? La vicepresidenta de la Fundación Hay Derecho considera que “lo único que hace falta en nuestro país para que esto ocurra es una regulación y una voluntad política para que se aumente la competencia en el sistema financiero”.